La importancia del lavador de Elisa, radica en que mediante este equipo, permite eliminar cualquier residuo y responde de forma eficiente, y para obtener resultados de alta precisión, se debe lavar con búfer, entre 1 y 3 litros de solución, de forma horizontal, para poder llegar a la placa, a través del suministro y extracción de cada pozo, con el fin de dispensar la solución del lavado, y en cada pozo se utilizan 300 µl de solución por ciclo. Asimismo, mediante la técnica de inyección, succión y suministro, el líquido alcanzará que los sobrantes de las sustancias logren salir.
Cabe destacar, que es importante mantener el equipo en perfectas condiciones, por lo que se requiere de mantenimientos preventivos, resumidos de la siguiente manera:
- Examinar los sensores ópticos de cada canal, éstos deben estar completamente fuera de cualquier suciedad.
- Corroborar que la calibración sea la adecuada.
- Inspeccionar el avance automático de la placa.