La espectrofotometría es una técnica analítica que permite determinar la concentración de un compuesto en solución. Se basa en el principio de que las moléculas absorben las radiaciones electromagnéticas y a su vez que la cantidad de luz absorbida depende de forma lineal de la concentración. Para ello se emplea un espectrofotómetro, equipo en el que se puede seleccionar la longitud de onda de la luz que pasa por una solución y medir la cantidad de luz absorbida por la misma.